“Los Arroyos” es un vino elaborado con uvas cultivadas en la
zona rural de la ciudad de San Nicolás de los Arroyos. Quienes lo hacemos, intentamos recrear (con
los métodos actuales de manejo del viñedo y vinificación) la época en que la
ciudad llegó a tener mil doscientas hectáreas de vides con las que se elaboraban once
millones de litros de vino por año en cincuenta y cinco bodegas. Es evidente
que el clima de la zona no se compara con el cordillerano, que es de donde salen los vinos
más conocidos del país, los que pueden encontrarse en supermercados y vinotecas. Sin
embargo, esta característica, lejos de ser un obstáculo, es una ventaja a la
hora de experimentar con vinos originales. Los vinos también tienen sus modas y
desde hace un tiempo la expresión del terroir es una característica muy buscada por los
consumidores que aspiran a experiencias novedosas. El terroir es el lugar donde
se cultiva la uva: es decir, el suelo y el clima. Las características del
terroir se transmiten a la uva y, lógicamente, al vino elaborado con esas uvas.
Es decir que un vino elaborado con uvas cultivadas en San Nicolás de los Arroyos es un vino
que ofrece una experiencia única, ya que no se le parecerá a ningún otro. El vino Los
Arroyos le saca el jugo a su terroir, logrando aromas y sabores que no se
encuentran en otros vinos. Algo que décadas atrás parecía imposible hoy se está
consiguiendo: elaborar buenos vinos en la provincia de Buenos Aires. Tanto en sus variedades tintas (Syrah, Merlot, Cabernet Sauvignon
y Refosco) como en las blancas (Torrontés riojano, Sauvignon Blanc y Moscatel)
los consumidores se muestran satisfechos de la experiencia de probar un vino
distinto a los habituales. Y, como sabemos, en la variedad está el gusto.
Investigación periodística realizada por Walter Alvarez, acerca de los cien años en que San Nicolás de los Arroyos fue una ciudad vitivinícola (1886-1986) y las experiencias de cultivo de viñedos en climas húmedos.